martes, 17 de abril de 2012

Sin, sentido; con, contigo.

Me dejas los lunes para echarme de menos los domingos, te balanceas en tus martes sin piedad de mis miércoles, vuelves los jueves y pienso que me guiñarás tu viernes, pero sólo algún sábado consigo quedarme en tu domingo. Vuelve el lunes; te vas con él.
Maldito ciclo mortal que me da vida.

Pienso en ti sobre las aceras de otras ciudades, porque pienso que allí podríamos empezar de 0, cuento hasta diez y recuerdo que a veces, uno más uno, no somos dos.
Ya lo saben, hay sumas que te restan. Y tú eres mi suma favorita, aunque no me des resultado.
Tú y tus extrañas matemáticas, yo y mi dolor de cabeza.


Quizás le falta sentido y por eso te siento tan conmigo, tú puedes ser cuerda que yo seré tu -loco- sonido.

Recuerda que no me duele más que a ti, estoy bien, cada vez que tropiezas me convierto en abrazo. 

2 comentarios:

  1. Me ha impactado. Es simplemente genial. :)

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  2. "cuento hasta diez y recuerdo que a veces, uno más uno, no somos dos.
    Ya lo saben, hay sumas que te restan"

    Me llaman la atención enormemente estas frases, pareciera que el uno más uno equiparable a un dos, sería la fórmula matemática de la unión perfecta. Y continúas de una manera excepcional, con un "hay sumas que te restan", aquí sí estoy contigo...en la última parte, la resta. Últimamente me ha dado por analizar los lastres culturales que a veces nos impiden amar y ser amados sin necesidades, aquí se denota uno...el de la dependencia.

    Corrígeme si me equivoco, pero no sería mejor pensar(se) como un todo que comparte, a esperar una suma que te reste...en el compartir no hay menos, no hay más...ni multiplicación ni división...simplemente el disfrutar(se), el gozar(se)...en definitiva conocer(se).
    En definitiva que uno sea UNO y el otro un UNO también, que se mezclen y se hagan vibrar en ese caminar junto a ( que no con). Los senti-mientos y el amor...llevan muy mal las matemáticas.

    Me ha encantado!

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